La Jefa de servicio de Medicina Estética de la Fundación Jiménez Díaz habla del tratamiento seguro y eficaz para cuidar los labios y darles un aspecto más saludable.
Este artículo se basa en las recomendaciones de la Dra. Victoria Trasmonte, publicadas en la revista Diez Minutos sobre las claves para unos labios perfectos.
Los labios son protagonistas indiscutibles en la estética facial. No se trata solo de volumen: la forma, proporción y estructura de cada labio condicionan los resultados y la elección del tratamiento ideal. En medicina estética, el tratamiento de labios con ácido hialurónico es una de las técnicas más versátiles, aplicado durante los meses de verano no solo es seguro y eficaz, sino que, además, puede ayudar a hidratarlos proporcionando un aspecto más saludable.
Existen muchos tipos de labios: finos, gruesos, asimétricos, con eversión marcada o escasa, con filtrum largo o corto… Cada uno requiere un enfoque diferente. Por eso, el primer paso es siempre un análisis personalizado, como el que realizamos la doctora María Fernández Pose y yo desde el servicio de medicina estética de la Fundación Jiménez Díaz. No hay labios perfectos, sino labios armónicos con el resto del rostro. El auge en la demanda de este tratamiento delata que es una de las zonas del rostro que más nos preocupa. Los gustos son dinámicos y varían según la edad: a los 20-30 años se desea mejorar la forma, disimular asimetrías… Y a partir de los 40 buscamos recuperar el volumen perdido con los años, redefinir el arco de Cupido, suavizar el contorno o un extra de jugosidad.
Cuidado de los labios: no todo es relleno
Según las necesidades, se puede aplicar con aguja, para aportar definición yvolumen a los labios, o con cánula, una opción más conservadora que nos permite realizar el tratamiento en las fechas más cercanas a cualquier evento al disminuir la incidencia de hematomas. Ambos métodos pueden combinarse para resultados más naturales y duraderos. Pero no todo es relleno.
En algunos casos, cuando el labio superior es muy largo o se pierde la exposición del bermellón, el liplift o lifting de labio es una excelente opción quirúrgica. Esta técnica, mínimamente invasiva, acorta la distancia entre la nariz y el labio, rejuvenece la expresión y mejora la visibilidad del rojo labial de forma permanente.
La clave está en elegir la técnica adecuada para cada tipo de labio y cada tipo de paciente y conservar una armonía entre facciones. Unos labios bien tratados no llaman la atención por el “retoque”, sino por su naturalidad y expresión. Y ahí está el verdadero arte de la medicina estética.
Conoce más sobre las recomendaciones de la Dra. Trasmonte en Diez Minutos